Uno de los intereses económicos que mantiene con vida la farsa del cambio climático es el interés del sector nuclear. Así lo digo porque así lo creo, y porque se dice demasiado poco. La energía nuclear necesita buscar más espacio en el reparto del pastel de la electricidad y con la excusa del cambio climático, y el de tachar de contaminante al CO2, trata de que le dejen dar un mordisco al sitio del carbón .
Aquí va un cuento sobre dos grandes empresas norteamericanas, Peabody y Exelon, sólo para comparar cómo les va. Cada una pertenece a un sector diferente, carbón y nuclear, y ambas son reinas de belleza en Illinois (ciudad más importante: Chicago). Hoy, el 48 % de la electricidad de Illinois proviene del carbón y otro 48 % es nuclear.
Exelon es la compañia eléctrica más importante en el sector nuclear norteamericano. Posee diez centrales nucleares, seis de las cuales se encuentran en Illinois. Allí, en 1960, una de sus antecesoras, ComEd (Commonwealth Edison), que forma hoy parte de Exelon Corporation, puso en marcha la primera central nuclear de Estados Unidos.
Cuando Obama era senador era un ferviente defensor del carbón pero cuando se hizo candidato a la presidencia se hizo también ecologista y prefirió ensalzar con grandilocuencia las energías renovables y también, con menos grandilocuencia, la renqueante energía nuclear, que desde el desastre de Three Mile Island, en 1979, no cuenta en EEUU con ninguna nueva planta. En agradecimiento Exelon apoyó a Obama, siendo probablemente una de las empresas (difícil demostrarlo aunque hay indicios) que más colaboró en la financiación de su campaña.
Pues bien, pongo arriba una gráfica que compara la evolución de las cotizaciones de estas dos empresas en Wall Street desde hace un año hasta hoy.
Se observa la caída brutal que sufrieron las acciones de Peabody justo hace un año, cuando Obama fue elegido presidente. Luego la cotización da la vuelta y su tendencia desde Enero es claramente alcista. Ocurre que, a pesar de las pegas que el carbón recibe en su propio país, en donde el consumo ha bajado, este combustible natural no deja de estar cada día más solicitado en Asia, con lo que EEUU cada vez exporta más, tanto con destino a la fabricación de acero, como con destino a la producción de electricidad. Por otra parte, Peabody tiene ya minas no sólo en la cuenca de Illinois sino en otras zonas de Estados Unidos y del mundo, principalmente de Australia. Así que le va muy bien.
¿Y Exelon? Pues miren la gráfica, por favor, que me van a dar la merienda, y concluyan ustedes mismos este post.