En el 340 antes de Cristo Aristóteles escribió "Meteorológica"; en 1637 se publica la obra de Descartes "Discurso del método" , un compendio de cuatro obras de las cuales una de ellas se dedica a los fenómenos geológicos y meteorológicos; en 1802, aparece una "Geografía física" de Kant, que es una recopilación de sus apuntes como profesor de Geografía en la Universidad (él no salió de Koenigsberg).
La obra de Kant, como la de los otros dos, está plagada de bobadas, pero, al menos, lo intentaron. A nuestros filósofos e intelectuales actuales, si se les planta enfrente un mapa del tiempo de hoy a escala global como el que pongo arriba, no entienden ni papa. Eso no les impedirá a algunos (los menos, gracias a Dios) tomar postura y hacer declaraciones altisonantes sobre el Planeta y el Calentamiento Global provocado por el CO2 de origen antropogénico.
La mayoría callan, porque al menos saben que de este gran asunto no entienden nada. Al hacerlo, sin embargo, parecen asentir con Ban Ki Moon, Obama, Sarkozy y Zapatero (parar el cambio climático, el mayor reto de la humanidad ... y demás bobadas).
Los modelos del IPCC fundamentalmente lo que predicen es un cambio en la configuración de presiones y vientos. Si uno no entiende un simple mapa del tiempo como el que pongo arriba, no entiende rien de rien de lo que dice el IPCC. Si uno no sabe distinguir en ese mapa la zona de convergencia intertropical, los alisios, los anticiclones subtropicales del Pacífico y del Atlántico, los vientos del oeste, etc ... queda out y reducido al silencio en el debate del cambio climático.
Y si nuestras mentes más inteligentes quedan fuera, el espacio es ocupado por los nuevos curas y frailes, por los ecologistas más brutos y reaccionarios.