06 noviembre 2006
Sahel: la mala fe de la ONU
Dice un informe de la ONU que "En el Sahel las lluvias han disminuido un 25% durante los ultimos 30 años". Lo recoge la sección de Medio Ambiente de "El País" con los consabidos aspavientos mediáticos, sin por supuesto publicar la gráfica que arriba pongo. Buscarla sólo me ha costado poner en Google "Sahel" y "rainfall". Ahora va a resultar que los sahelianos que llegan en pateras a Canarias lo hacen porque les hemos estropeado el clima con nuestras emisiones de CO2.
Basta un vistazo a la gráfica para saber que es mentira.
Es más,desde 1945 hasta 1975, la temperatura global no sólo no aumentó sino que tendió a disminuir. Fue en este período de ligero enfriamiento cuando las lluvias del Sahel decrecieron, dando lugar a las migraciones y hambrunas de principios de los años 70. Desde entonces las lluvias mal que bien se han ido recuperando.
Las lluvias del Sahel son de carácter monzónico. Se producen en verano cuando el calor del continente forma bajas presiones y atrae tierra adentro el aire húmedo del Atlántico. Por lo tanto las sequías en el Sahel para nada están relacionadas con el calentamiento. Más bien al contrario. Incluso hay teorías (que yo no apoyo incodicionalmente) que indican que es un enfriamiento de las aguas del Atlántico tropical las que las explicarían, al producirse menos evaporación y menos aporte de humedad al continente.
Lo que no tiene ninguna explicación teórica ni lo muestran los datos de la historia climática es que el calor desertiza Africa. Se conoce sin incertidumbre alguna que en los tiempos glaciales el Sahara y el Sahel se expandieron a costa de selvas y sabanas.